Según informa el diario italiano "La Repubblica", los editores piden el cierre de esta página, ya que, de lo contrario, "tendrán que enfrentarse a sanciones penales y económicas".

Por su parte, el director del Instituto Cavazza, Mario Barbuto, ha afirmado que esto supone un grave perjuici para la comunidad ciega italiana, ya que de momento no están a la venta las obras en formato disquete, por lo que no las pueden leer.

Las editoras se defienden alegando que muchas obras están ya disponibles en formato CD-ROM, aunque éstos no están diseñados para que sean accesibles a las personas ciegas.

Además, consideran injusto que cualquier usuario de Internet pueda leer de forma gratuita las obras que publican, consultando la página "web" del Instituto Cavazza, acusación que los responsable de este último han calificado de incierta, ya que para ser socio de su biblioteca es necesario presentar un certificado que pruebe que el usuario es ciego, y sólo puede acceder a ella mediante una contraseña, y el pago de unos derechos.

Por el momento, ambas parte han llegado al acuerdo de que la página de Internet del Cavazza pueda seguir ofreciendo su servicio de bilbioteca, siempre y cuando se comprometa a hacerla más segura, con el fin de que los piratas informáticos no se beneficien de forma ileal de ella.