Los daños ocasionados por este tipo de vehículos, de los que debe hacerse cargo el Consorcio, dependiente del Ministerio de Economía y Hacienda, han aumentado casi un 19 por ciento con respecto a los de 1991, que se situaron en 4.931 millones de pesetas.

En los últimos cinco años, los pagos del Consorcio por este concepto se han triplicado, lo que poe de manifiesto que el número de vehículos desconocidos, sin seguro, robados o asegurados en entidades en quiebra que se han visto implicados en accidentes ha aumentado de manera sustancial.

De los 5.864 millones de pesetas pagados en 1992, la mayor parte, un total de 2.344 millones de pesetas correspondieron a siniestros de vehículos sin seguro. Esta cantidad ha crecido un 3,33 por ciento respecto al año pasado y se ha multiplicado por seis veces en los últimos cinco años.

La patronal de SegurosUnespa estima que actualmente circulan por España entre 800.000 y 1.000.000 de vehículos sin seguro, entre automóviles, motos y ciclomotores, según datos facilitados a esta agencia por la propia patronal.

Actualmente, se encuentra paralizado el nuevo proyecto de ley que modifica la legislación reguladora de los seguros como consecuencia de la disolución de las cámaras. Este proyecto aumentaba considerablemente la cuantía de las multas por conducir vehículos sin seguro, que oscilaban entre las 100.000las 300.000 pesetas.

ASEGURADORAS EN QUIEBRA

Otra cantidad importante del dinero pagado por el Consorcio de Compensación de Seguros correspondió a siniestros de vehículos asegurados en entidades que han quebrado, un total de 2.253 millones de pesetas, más del doble de los 1.061 millones abonados en este tipo de accidentes el año anterior.

Según las fuentes del Consorcio de Compensación de Seguros consultadas, la falta de conocimiento de la quiebra de aseguradoras a sus clientes está ocasionand graves problemas, ya que cada vez son más las personas que se ven implicadas en accidentes y al acudir a su aseguradora está en liquidación y no puede hacer frente al pago de los daños.

El resto se destinó a pagar los daños ocasionados por vehículos desconocidos que se dieron a la fuga, la mayoría por no tener seguro, a juicio del Consorcio, un total de 1.106 millones de pesetas, 348 millones menos que en 1991, y los daños originados por vehículos robados (160 millones, frente a los 147 del año anteror).

En total, en 1992 el Consorcio de Compensación de Seguros tramitó 12.790 expedientes, 943 más que el año anterior, de los que 4.671 correspondieron a accidentes de vehículos desconocidos, 4.066 a vehículos sin seguro, 3.705 a vehículos asegurados en entidades en liquidación y 348 a vehículos robados.

El número total de reclamaciones recibidas por este organismo derivadas de los accidentes en los que se vieron implicados este tipo de vehículos se duplicó el pasado año. Pasaron de 14.582 reclaaciones en 1991 a 30.771 en 1992, siendo las más numerosas las relacionadas con vehículos asegurados en entidades en quiebra (13.196 reclamaciones).