El consejero de Economía e Innovación Tecnológica, Fernando Merry del Val, presentó la campaña hoy en la sede de su departamento y entre las medidas que establece el decálogo destacó la de vigilar que la llama sea de color de azul, lo que demuestra que la combustión es correcta, que no se deben obstruir los conductos de ventilación ni de salida de gases producidos por la combustión, y que es fundamental evitar derrames de líquidos y corrientes de aire que puedan apagar la llama.

También aconseja abrir las ventanas en caso de olor a gas, no provocar llamas ni chispas ni accionar interruptores eléctricos, y avisar al servicio de urgencias. En las instalaciones de butano/propano, hay que velar por el buen estado del regulador y del tubo flexible de goma, así como su caducidad.

Asimismo, recuerda que la bombona de gas en uso nunca se colocará en zonas próximas a altas temperaturas, como hornos y fuegos, y debe estar en un habitáculo aireado no hermético.

Igualmente, advierte de que una deficiente salida de los productos de la combustión o un mal funcionamiento del aparato a gas puede producir riesgos graves de intoxicación, que la combustión de las calderas estancas es más segura que la de las atmosféricas y que hay que revisar la chimenea del edificio, debido a que la salida de humos puede estar obstruida por hojas, ramas, nidos u obras mal ejecutadas.

Después de adelantar el contenido de la campaña informativa, Merry del Val resaltó la idoneidad de la normativa que aplica la Comunidad de Madrid para incrementar los niveles de seguridad exigibles, y agregó que se trata de la reglamentación "más extensa y exigente" de todo el territorio nacional.

Según los últimos datos de 2005, el número de clientes en la región de gas envasado (fundamentalmente butano y propano) asciende a 582.000, mientras que los del canalizado se aproxima a los 80.000. En cuanto a gas natural, el más utilizado, el número de clientes alcanza el millón y medio.

Finalmente, el consejero recordó las ventajas del Plan Renove de Aparatos Domésticos de Gas, que puso en marcha el Gobierno regional y que subvenciona el cambio de aparatos receptores correspondientes a instalaciones de climatización, agua caliente sanitaria o cocción doméstica que tengan el gas como fuente de energía con más de 10 años de antigüedad o produzcan mala combustión.