En una rueda de prensa, Vegara destacó el efecto positivo sobre la renta de las familias de la bajada de la inflación y el hecho de que la inflación armonizada se sitúe por primera vez desde agosto de 2001 por debajo de la media de los países de la zona euro.

Esto se produce, según Vegara, porque en España los precios se están moderando con mayor intensidad que en el resto de países de la zona euro como consecuencia del mayor peso de los productos energéticos y alimentos en la cesta utilizada para calcular el IPC.

En cuanto a la posibilidad de entrar en deflación, Vegara rechazó que pueda llegar a producirse un descenso generalizado y persistente de los precios y señaló que eso queda demostrado en la inflación subyacente (no tiene en cuenta la energía), que se sitúa en el 2,4%.

Asimismo, tampoco consideró importante el efecto de la caída del consumo en el descenso del IPC, ya que, según Vegara, el 80% de la caída de los precios se debe a la bajada del petróleo y de los alimentos.