ECONOMIA CIFRA EN 36.493 LOS DESPEDIDOS EN ENERO, UN 2,8 POR CIEN MAS QUE EN 1992

MADRID
SERVIMEDIA

Un total de 36.493 personas fueron despedidas el pasado mes de enero, lo que supone un aumento del 2,76 por ciento respecto al mismo periodo de 1992, segúndatos del Ministerio de Economía facilitados a Servimedia.

De ellos, 11.194 se produjeron mediante los despidos colectivos derivados de expedientes de extinción de empleo aprobados por el Ministerio de Trabajo, cifra que representa un crecimiento del 89 por ciento en relación al año pasado.

Otros 21.053 trabajadores perdieron el empleo tras pactar indemnizaciones en los órganos de mediación y arbitraje, lo que refleja un descenso del 17 por ciento en las rescisiones laborales por esta vía, la máscara para las empresas.

Los 4.246 despedidos restantes tuvieron que pasar por los Juzgados de lo Social, al no haber alcanzado ningún acuerdo previo los trabajadores y las empresas. El recurso a esta última instancia creció un 11 por cien respecto a 1992.

A la hora de valorar estos datos, es preciso tener en cuenta que 1992 marcó la cota más alta desde 1984, con un total de 405.763 despedidos, lo que suponía un aumento del 5 por cien respecto a 1991.

Según la información de que dispone el Miisterio de Economía, la tasa de paro registrada en el último trimestre de 1992 en España, cuando el desempleo afectó al 19,5 por ciento de la población activa, era más del doble que la media de la OCDE, situada en el 7,8 por cien.

El nivel de desempleo en España era también muy superior a la media de los países de la Comunidad Europea (10,2 por cien), casi el triple que la de Estados Unidos (7,2 por cien) y más de ocho veces superior a la de Japón (2,3 por cien).

PERDIDA DE CONFIANZA

La caída dl empleo ha sido la principal causa de que el índice de confianza del consumidor que elabora la CE para cada uno de los "doce" haya alcanzado el pasado mes de marzo en España el punto más bajo desde el inicio de la crisis.

Por esas fechas, según el Ministerio de Economía, en España las personas que veían el futuro con pesimismo eran un 35 por ciento más que las optimistas.

El pesimismo afectaba a la esfera doméstica, en donde los pesimistas superan en un 13 por ciento a quienes piensan que las coas ya no podían ir a peor, pero todavía más a la valoración sobre la marcha general de la economía, donde la diferenciaba era del 31 por cien.

No obstante, fuentes del Ministerio de Economía consultadas por esta agencia indicaron que las expectativas de las familias apuntan a que "tanto la situación económica del país como la del hogar puede mejorar en los próximos meses".

A su juicio, "la desconfianza de los consumidores está descendiendo", aunque todavían consideran que "es un mal momento para omprar bienes de consumo duradero", (electrodomésticos y coches, principalmente).

Pese a ello, una mayoría mostraban un sentimiento de pesimismo en relación al desempleo, una impresión que luego se vio confirmado por el fuerte incremento del paro contabilizado en la Encuesta de Población Activa (EPA) del primer trimestre de este año.

(SERVIMEDIA)
22 Mayo 1993
M