En declaraciones a Servimedia, Romero denunció que, por ejemplo, en el paraje natural de Isla Cristina y Las Marismas de Ayamonte, existe una ocupación indebida del terreno de dominio público, con vertido de escombros y excesiva presencia de cazadores frtivos, que pueden perjudicar seriamente el ecosistema.

Por otro lado, en uno de los más importantes humedales de España, en de las Marismas de Odiel, "los residuos fecales de urbanizaciones cercanas van a parar a esta zona", por lo que solicita la inmediata intervención de la Jefatura de Costas y de la Agencia de Medio Ambiente (AMA).

Sumó además, entre otras denuncias, la tala indiscriminada de pinos en Las Marismas o la utilización del Complejo Lagunar de Palos de la Frontera en el papel de vetedero de residuos fitosanitarios como herbicidas, pesticidas, y desechos plásticos de los utilizados en los cultivos de fresas.

Romero destacó cómo el estado lamentable que presentan los parajes naturales onubenses, en lo referente a su conservación, motivó, en estos últimos meses, una interpelación parlamentaria del Partido Popular (PP), en la Cámara Andaluza.

El presidente de los ecologistas onubenses consideró que son rigurosamente "falsas" y "sin otra finalidad que conseguir el voto", las cosideraciones de la Administración andaluza, que aseguran que el 17 por ciento del territorio andaluz es superficie protegida.

Finalmente, recordó que los ecologistas onubenses siguen denunciando los graves riesgos que, a su juicio, corren otros parajes más conocidos como pueden ser Doñana e Isla Canela, en la provincia de Huelva, en el caso que se ejecuten los proyectos turísticos existentes.