Los ecologistas consideran inaceptable que el yuntamiento defienda "a capa y espada" un proyecto que, aseguran, sólo responde a los intereses económicos de unos pocos, "aunque sea a costa de la destrucción de nuestro patrimonio natural y, por tanto, en detrimento de los intereses de la mayoría".

Asimismo, acusaron a los responsables municipales de no mostrar oposición alguna al recorte presupuestario de 28.000 millones de pesetas que ha sufrido el transporte de cercanías.

Según Aedenat, el concejal de Infraestructuras del Ayuntamiento de Madid, Enrique Villoria, falseó la realidad cuando dijo que en el trazado previsto a través del Monte de El Pardo no hay ni matorrales.

"Nada más alejado de la realidad", agregaron, "ya que tanto en los informes del MOPT como en los elaborados por la Comunidad de Madrid, se pone de manifiesto el enorme impacto ambiental que la construcción de la M-40 ocasionaría a ese entorno, uno de los encinares sobre arenas mejor conservados del mundo".

Los conservacionistas estiman que si finalmente se realizan as obras previstas, éstas podrían destruir más de 3.000 encinas de porte arbóreo y casi 10.000 de porte arbustivo.

También mostraron su asombro ante el silencio que, afirman, mantiene al respecto la concejala de Medio Ambiente, Esperanza Aguirre.

Esta denuncia coincide con la decisión anunciada recientemente por el ministro de Obras Públicas y Transportes, José Borrell, de someter a reestudio los proyectos iniciales.

Finalmente, los conservacionistas han pedido al Gobierno municipal que dejede apoyar el cierre norte de la M-40 y desarrolle el transporte colectivo.