Esas ONG hicieron esas consideraciones en un comunicado después de que el Gobierno central y la Junta de Castilla-La Mancha crearan este lunes una comisión mixta de trabajo para elaborar un Marco de Actuaciones Prioritarias para el parque.

“Se está creando el escenario oportuno para, de una vez por todas, abordar los problemas que han llevado al deterioro más absoluto a este espacio protegido”, destacaron.

Las organizaciones pidieron que a Las Tablas de Daimiel se aplique los mismos mecanismos de actuación -con las lógicas especificidades- que al Mar Menor o a Doñana.

“Ni España ni Castilla-La Mancha se pueden permitir el gravísimo deterioro medioambiental de este espacio ni el colapso hídrico, con efectos críticos en la agricultura, que se da en los acuíferos de La Mancha, todo ello con un grave deterioro de la imagen internacional”, indicaron.

Por ello, decidieron llevar a las administraciones un primer documento de propuestas que plantea una transición justa y progresiva hacia un nuevo modelo de desarrollo territorial y agrícola.

“EXCESIVA DEMANDA DE AGUA”

El objetivo es que se reduzcan las extracciones hídricas para permitir que vuelva a salir agua de forma natural por los ‘ojos’ del Guadiana y que ello garantice el futuro de las explotaciones legales de regadío, que deben acomodarse a las posibilidades reales de riego, así como alternativas económicas viables para quienes deban adaptarse a la nueva situación.

Ecologistas en Acción, SEO/BirdLife y WWF advirtieron de que deberán evitarse “errores del pasado” y crear “un escenario nuevo”. Indicaron que el Plan de Compensación de Rentas o el Plan Especial del Alto Guadiana (PEAG) supusieron más de 240 millones de gasto público y “no consiguieron resultados ni un cambio estructural que permitiera disminuir el volumen de demanda extraído”.

“En la actualidad, esta excesiva demanda de agua supone un déficit de 1.800 hm3, solo en el acuífero de La Mancha occidental, a causa de que se extraen 325 hm3/año, de los cuales al menos 90 son de ilegales, muy por encima de lo que se debería”, recalcaron.

PROPUESTAS

Como “medidas prioritarias y urgentes”, las ONG propusieron detener las extracciones ilegales de agua y la sobreexplotación de las legales, así como revisar las concesiones y mejorar su control, incluyendo la compra de terrenos en zonas clave donde retirar el regadío suponga una posibilidad real de ampliación del espacio protegido o donde se liberen volúmenes para cederlos al humedal de Daimiel mediante los pozos de emergencia.

También recomendaron “medidas ambiciosas” para reducir la contaminación de origen agrario y del saneamiento urbano gracias las mejores tecnologías disponibles y soluciones basadas en la naturaleza.

Medidas para la viabilidad económica de la agricultura de secano, mejorando los márgenes de los productores con más valor añadido de la producción a través de estrategias como la producción ecológica, y actuaciones de deslinde y señalización del dominio público hidráulico, restauración hidrogeomorfológica y mejora de la vegetación del humedal para recuperar la estructura natural del ecosistema y de su biodiversidad asociada son otras propuestas.