En una nota de prensa, ambas organizaciones piden que se debata en ese consejo consultivo por qué se ha permitido a Iberdrola construir 4.600 MW de centrales térmicas en España.

A juicio de los ecologistas, Iberdrola, que supera el 20% de capacidad de producción de electricidad en el sistema peninsular, debía limitar su presencia en el mercado eléctrico para facilitar la competencia.

"No podemos admitir el trato de favor a empresas contaminantes. Queremos saber si quienes aspiran a controlar Ibedrola van a seguir con su política de expansión de centrales térmicas burlando la ley", ha manifestado José Luis García Ortega, responsable de la campaña de Energía Limpia de Greenpeace España.