En un comunicado difundido hoy, la organización ecologista aseguró que desde 1998 se han destruido 600 hectáreas de hábitat lincero en el norte de la región para su transformación en una explotación ganadera.

Por ello. Ecologistas en Acción ha pedido a la Junta de Extremadura que el propietario de la finca ganadera no reciba más ayudas autonómicas ni europeas, ya que, en opinión de la organización, está contribuyendo a la extinción del lince ibérico.