Arana trasladó en un comunicado todo el "apoyo y solidaridad" de la formación de izquierdas a la familia del guardia civil asesinado y deseó una pronta recuperación a las cuatro personas heridas en esta acción terrorista.

El dirigente de Ezker Batua interpretó que, con este atentado, ETA "apuesta definitivamente por una estrategia de socialización del dolor y el sufrimiento", demostrando así su "rechazo a la voluntad mayoritaria de la sociedad vasca, que reivindica el cese de toda expresión de violencia y el respeto a los derechos humanos de todas las personas".

A su juicio, ETA "actúa cuando puede, donde puede y contra quien puede, en un intento por demostrar su fuerza y su capacidad operativa".

Por ello, emplaza a la izquierda abertzale a que condene esta acción terrorista, porque, a su juicio, "una persona, sea cual sea su sensibilidad o ideología, no puede permanecer impasible mientras asesinan impunemente a otra persona".

Arana señaló que la izquierda abertzale "tiene la obligación política y ética de rechazar sin ningún matiz la violencia, decir 'no' a ETA, romper las amarras que le unen a la organización terrorista y dejar solos a quienes matan y coaccionan".

"El día en que Batasuna escuche a su propia base social y asuma la voluntad mayoritaria de la sociedad vasca en contra de la violencia, el final de ETA será una realidad", sentenció.