Duran Lleida, que hizo estas declaraciones a Catalunya Ràdio, señaló que esta semana podría reunirse con el presidente del Ejecutivo, José María Aznar, y que su intención es trasladarle la preocupación por determindas declaraciones de algunos miembros del PP que, a su juicio, contribuyen a la "crispación" política.

El líder democristiano indicó que "el apoyo permanente de IU y el nuestro es incompatible, y en la medida en que el Gobierno apostara por un nuevo árbitro, que creo que no es el caso, anularía la condición de árbitro de CiU y entraríamos en una situación de provisionalidad".

En su próxima reunión con Aznar, cuya fecha no ha sido fijada, Duran le pedirá "una reorientación de la actual situación, orque tenemos fe en el país y en la acción de gobierno, pero todos estamos obligados a corregir algunas de nuestras actitudes".

En los últimos días, varios dirigentes de CiU han expresado su malestar por lo que consideran intentos del Gobierno de negociar el apoyo de IU para superar votaciones parlamentarias en las que no cuentan con los votos de los nacionalistas, como el caso de la convalidación del decreto sobre la televisión digital.