Duran hace partícipe al jefe del Ejecutivo de la polémica por el uso de las distintas lenguas del Estado en el Congreso de los Diputados, cuyo presidente, Manuel Marín, fijó un criterio de flexibilidad para permitir usarlas en breves intervenciones posteriormente traducidas que decidió ayer mismo retirar por el intento de ERC de "forzar" la situación.

"Zapatero no puede olvidar de cara a su coherencia que ayer mismo defendía ante la Asamblea Nacional Francesa", argumentó, "que la España del castellano es grande, pero lo es más sumada a la España del catalán, del gallego y del euskera y que la España democrática es inseparable del valor a la diversidad".

A su juicio, "lo que realmente obstaculiza el uso del catalán no es el presidente del Congreso sino la normativa legal vigente y, por tanto, el Reglamento", por lo que "no es sólo el PSOE quien debería implicarse en este debate con un compromiso político claro", sino el propio jefe del Ejecutivo.

Duran considera una "incoherencia" pedir la oficialidad del catalán en Europa y negarla en España, por lo que le emplazó al PSOE a aceptar las enmiendas de todos los grupos salvo el suyo y el popular para regular el uso de las lenguas cooficiales.

La próxima reunión de la ponencia que trabaja en la reforma del Reglamento será, en su opinión, la oportunidad del PSOE de demostrar "su coherencia y expresar su talante", con "el debido respeto a las minorías, especialmente en una cuestión de tanta sensibilidad como el de la diversidad de las distintas lenguas".