"No me cabe la menor duda que el Rey en persona y como jefe supremo de las Fuerzas Armadas tuvo una actitud contundente y decisiva para abortar el intento del golpe de Estado del 23-F. Eso para mí está fuera de cualquier duda, sin perjuicio que otras personas e instituciones ayudaran a que no cuajara ese ensayo de golpe de Estado, pero sin la imagen del Rey vestido de militar y sin sus llamadas telefónicas previas siempre cabrá la duda de si todo lo demás hubiese sido suficiente", señaló Duran.

A su juicio, "este reconocimiento está implícito en la declaración institucional aprobada en el día de hoy en el Congreso de los Diputados", por lo que "creo que está de sobra polemizar sobre la actitud de ERC".

En relación al anuncio realizado por el coordinador de IC-EuiA, Jordi Miralles, de presentar mediante IU una iniciativa parlamentaria para que el Rey explique lo que sabe sobre el 23-F, Duran i Lleida señaló que "realmente hay dirigentes y partidos políticos que han perdido la brújula y que han hecho y hacen enloquecer la política estos dos últimos años".

"Hay que dejar tranquilo al Jefe del Estado", añadió Duran, para quien el monarca "es un activo de la democracia española y de la imagen de España en el mundo, y sigue siendo la mejor tarjeta de presentación que tenemos en nuestra política exterior con todo lo que ello significa en el ámbito político, económico y social".