En una rueda de prensa en el Congreso de los Diputados, Duran denunció el "cambio de actitud" de los partidos que integran el Gobierno de la Generalitar "en dos horas, el tiempo necesario para que desde Madrid el PSOE y el Gobierno les dieran instrucciones".

El portavoz de CiU respaldó sus teorías con las informaciones publicadas a lo largo de la tarde de ayer, porque a las dos de la tarde los partidos del tripartito "valoraban muy bien la propuesta de CiU y especialmente su aproximación a las del tripartito. Si en una negociación no hay aproximación, no hay resultado feliz".

En cambio, a las cuatro de la tarde, el tiempo suficiente para que "Madrid conociera la propuesta, reaccionara y diera la contraseña", los mismos partidos ya consideraban que la propuesta de financiación de CiU dificultaba la negociación.

"Ese es el gran problema del Estatuto", prosiguió, "que el PSC no puede aprobar un texto que rechace el PSOE, y como al PSC se le añade como cuadrilla el conjunto Esquerra e Iniciativa, a continuación no sólo se hace cambiar la posición" a los socialistas catalanes, sino también a sus socios.

Otro de los problemas es, para Duran, la "falta de liderazgo por parte del presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, que en una semana ha llamado cinco veces más al presidente del Bar‡a, Joan Laporta, para que coloque una pancarta en el Nou Camp, que en dieciséis meses al responsable del principal partido de la oposición", Artur Mas.