El aristócata, que en la actualidad cumple ya una condena en la prisión Sevilla-1 por el rapto de una niña de 5 años, tráfico de drogas y corrupción de menores, deberá enfrentarse ahora a una petición por parte del fiscal de ocho años de cárcel.

No obstante, según señalaron fuentes próximas al caso, es probable que el fiscal contemple en sus conclusiones una eximente incompleta de trastorno mental provocado por problemas de personalidad, adicción a la cocaína y consumo de alcohol.

El fiscal considera probao que Rafael Medina contactó con la madre de una de las menores que aparecen en las fotografías requisadas por la policía, a través de un anuncio insertado en la prensa.

La mujer, según se desprende del escrito del fiscal, consintió que el duque de Feria se fotografiase con su hija para satisfacer sus instintos sexuales, por lo que también se sentará en el banquillo de los acusados.

El ministerio público ha pedido para la madre, Ana R.M., una pena de cinco años de prisión menor y la pérdida de lapatria potestad sobre su hija.

El duque de Feria, que ha sido sometido a programas de prevención del suicidio debido a los problemas depresivos que sufre y que cumple su actual condena en la enfermería de la cárcel Sevilla-1, disfruta desde la pasada primavera de permisos penitenciarios de fin de semana.