DUQUE DE FERIA. EL CAREO AUMENTA LAS DUDAS SOBRE LA IMPLICACION DE LA MADRE DE ANA MARIA EN EL RAPTO DE SU HIJA
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El careo entre Flora Trabajo, la madre de la niña presuntamente raptada por el duque de Feria y otras tres mueres, y un testigo presencial, Manuel Peracaula, ha incrementado las dudas sobre la implicación de la mujer en los hechos, ya que el tribunal de la Sala Séptima de la Audiencia Provincial de Sevilla se ha decantado a favor del testimonio del testigo.
Trabajo y Peracaula protagonizaron un careo de poco más de tres minutos en los que ambos mantuvieron sus posiciones iniciales. La madre de la niña mantiene que cuando Manuel Peracaula entregó a la hermana de la pequeña Ana María en su casa, al encontrarlallorando sola en el parque, le dijo a su suegra que había visto cómo una mujer de pantalones oscuros había empujado a la pequeña a un taxi.
Sin embargo, Peracaula, un jubilado de 64 años, ha convencido al tribunal al negar esos términos y asegurar que él tan solo vio llorar a la hermana de Ana María y la entregó a la suegra de Flora Trabajo sin informarle de ninguna otra circunstancia. El presidente del tribunal, Antonio Gil Merino, dio mayor veracidad al testimonio del jubilado.
La quinta sesióndel juicio contra el duque de Feria y las tres prostitutas implicadas en el presunto rapto de la niña han puesto de relieve nuevas contradicciones entre los testigos.
La recepcionista del apartamento del duque, Inmaculada Solís, aseguró no recordar "absolutamente nada" de la jornada del día de autos, el 4 de marzo de 1993. Admitió que vio entrar a una joven con una niña en el edificio, pero dijo no recordar si vio entrar o salir al duque esa mañana.
En su declaración anterior ante el Juzgado de Istrucción número 20, la testigo declaró que no tenía ninguna duda de que Rafael Medina llegó después de que llegara la menor al apartamento. "Si declaré éso, será verdad", afirmó hoy.
Concluídas declaraciones de los testigos de la fiscal y la acusación, han iniciado hoy su testimonio los testigos de la defensa. El primero en hacerlo fue Julio Rubio, abogado de la empresa de fabricación de piel Empila (Sevilla), de la que es consejero y directivo Rafael Medina.
Rubio aseguró que Medina pasó toda l tarde de la víspera del 4 de marzo reunido en una junta general de la compañía. Sandra Alvarez había dicho que Medina le había encargado llevarle una niña ese mismo día.
La gerente del Bingo Andalucía de Sevilla, Carmen Vázquez, aseguró que el duque "siempre pulcro, elegante y educado" era asiduo a su local y estuvo presente en el mediodía del 4 de marzo.
Trinidad Rodríguez, limpiadora de la casa del Palacio de Osuna, que está frente al apartamento del duque, vio llegar a Rafael Medina a las 14,5 horas a su casa y aseguró que estuvo hablando con él durante media hora después de que aparcara el coche. Según declaró, en aquella conversación ella le dijo que le había visto en una entrevista en el "Hola" y el duque le prometió que le escribiría un poema dedicado.
También el empleado del BBV, Joaquín Nogales, reconoció que el duque realizó gestiones bancarias esa mañana. Según dijo, Rafael Medina cobró un cheque de 100.00 pesetas después de que la sucursal conformara por teléfono ese cheque.
Todos los testigos de la defensa se contradicen con la declaración de Sandra Alvarez, la joven presunta autora del rapto, quien aseguró que el duque permaneció toda la mañana del 4 de marzo en su apartamento.
Por último, declaró a puerta cerrada la única menor que ha tomado parte en el juicio, una joven de 15 años a la que el duque pidió en el verano del 92 que posara en bikini para él en una habitación del Hotel Meliá de Sevilla.
El juicio, que estaba previsto que acabara hoy, continuará los próimos jueves y viernes, dado que el lunes es festivo en Andalucía y la Sala Séptima tiene comprometido otra vista el martes y miércoles.
(SERVIMEDIA)
25 Feb 1994
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