Dicho calendario empezará con la Jornada Mundial por el Trabajo Decente que tendrá lugar el 7 de octubre promovida por la Confederación Sindical Internacional (CSI) y la Confederación Europea de Sindicatos (CES) que este año está dedicada a la justicia salarial.

Ambos líderes sindicales anunciarán, además, el calendario de asambleas, concentraciones y movilizaciones previstas para los próximos meses por ambos sindicatos para exigir el incremento de los salarios en los convenios colectivos y la negociación de un pacto general de salarios en el marco del Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC).

Entre marzo y mayo de 2022, sindicatos y patronal celebraron diferentes reuniones en el marco del AENC, aunque aparcaron la negociación sin acuerdo. Ambas partes acercaron posturas y llegaron a coincidir en subidas de base similares (en torno a un 8% en el período 2022-2024).

Pero la negociación encalló porque para los sindicatos era fundamental incluir cláusulas de revisión salarial para garantizar un ascenso al final de cada año o de un período corto de tiempo para evitar la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores, lo que CEOE rechazó en todo momento, al considerar que muchas empresas y sectores no pueden afrontar ese coste. Además, el presidente de la patronal, Antonio Garamendi, avisó de que ligar salarios al IPC podría alimentar la “espiral” inflacionista.

Para los sindicatos, en cambio, no elevar los salarios no sólo perjudicará a los trabajadores, sino al conjunto de la economía, ya que se reducirá cada vez más el consumo interno en España.

ALTURA DE MIRAS

Precisamente, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, pidió este lunes en el Congreso de los Diputados a sindicatos y patronal que retomen el diálogo que aparcaron el pasado mes de mayo sin llegar a un consenso.

“Les pido que tengan altura de miras, como siempre hacen los agentes sociales en nuestro país”, indicó Díaz, quien puso como ejemplo los acuerdos a los que llegaron sindicatos y patronal durante la pandemia. “El país necesita que se pongan de acuerdo, se den la mano y estén a la altura”, abundó.

La titular de Trabajo incidió también en la necesidad de que se incrementen los salarios, ya que las retribuciones en convenio colectivo se han elevado en lo que va de año un 2,6% de media, frente a una inflación superior al 10%.

Además, apuntó que España está sufriendo de manera “más intensa” la pérdida de poder adquisitivo en comparación con el resto de países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).

Asimismo, alertó de que esto no sólo afecta a las personas en su día a día, sino al conjunto de la economía. “Creemos que si no se corrige esta situación de forma rápida en los próximos meses, veremos una reducción del consumo, la demanda interna y una reducción del crecimiento de la economía y este sí será el efecto verdadero de segunda ronda”, aseveró la titular de Trabajo. En este punto, enfatizó que “los salarios no son los culpables de la inflación”, sino que son “las víctimas”.