Josefa Charlín fue extraditada ayr de Portugal, donde fue detenida el 14 de septiembre del año pasado en la localidad de Vila Nova de Gaia, tras haber permanecido siete años en busca y captura.

Según las mismas fuentes, Garzón decretó su ingreso en prisión incondicional tras comunicarle su procesamiento por presuntos delitos de tráfico de drogas y blanqueo de dinero, consistente en el desembarco de diversos alijos de cocaína de un total de 2.900 kilos de cocaína, de los que 500 fueron arrojados en aguas internacionales.

La Fiscaía Antidroga, dirigida por José Ramón López Fando, considera que Josefa Charlín es la última responsable de la gestión económica del "clan de los Charlines".

Josefa Charlín es hija del patriarca del mencionado clan gallego, Manuel Charlín Gama, quien fue condenado en su día por la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional a 20 años de prisión y a pagar una multa de 225 millones de pesetas, como responsable de un delito contra la salud pública cometido al intentar introducir en España 600 kilos de cocana procedentes de Iberoamérica.