Gracias a la mejora de las vetas en el exterior, un 27%, Dragados consiguió aumentar su facturación el año pasado en un 4%, caracterizado por la depresión del mercado nacional. El beneficio consolidado, después de impuestos y socios minoritarios, fue de 8.875 millones, un 1,5% superior.

La constructora invirtió 18.000 millones de pesetas en 1996 y para no aumentar su endeudamiento, procedió a la venta de activos no estratégicos. También dedicó 4.460 millones en reestructurar su personal, actividad que continuará durante 1997.

Dragados ha decidido finalmente proceder a la fusión por absorción de Comylsa, empresa adquirida en 1994, al considerar que su actuación coincide con la de sociedad matriz. En cambio, mantendrá la actividad independiente de Tecsa, dedicada fundamentalmente a infraestructuras de ferrocarriles en el País Vasco.

Por su parte, FCC obtuvo una facturación en 1996 de 429.359 millones de pesetas, un 5,3% superior a la del año anterior. La actividad exterior representó 26.727 millones, un 19,5%, y los beneficos consolidados después de impuestos y minoritarios fueron 13.035 millones, un 1,3% superior.

La cartera de obras al cierre del ejercicio supera 1,1 billones de pesetas, ya que la empresa ha conseguido en el último trimestre del año numerosos contratos de gran volumen económico, como la construcción de la tercera pista de Barajas, la ampliación del metro de Madrid y la segunda licencia de 'handling' en los aeropuertos de Barcelona y Málaga, entre otros.