El acontecimiento se produjo en el Centro de Cría en Cautividad de El Acebuche, en el Parque Nacional de Doñana, donde se desarrolla el programa puesto en marcha por el Ministerio de Medio Ambiente y la Junta de Andalucía para evitar la extinción del lince ibérico, el carnívoro más amenazado del planeta.

Este cumpleaños coincide con el nacimiento el pasado jueves de otros dos cachorros de lince ibérico hijos de la misma madre.

El macho y las dos hembras (Brezo, Brecina y Brisa) que nacieron hace un año constituyen un hito científico, ya que nunca antes se había reproducido la especie en cautividad, y un éxito del trabajo que desarrolla el equipo de investigadores que dirige Astrid Vargas en el centro de El Acebuche, según informó la Junta.

Pese al fallecimiento, el 11 de mayo de 2005, de uno de los cachorros, en concreto Brezina, el programa de cría en cautividad continúa desarrollándose conforme a los plazos y actuaciones previstas.

La muerte de Brezina se produjo a causa de una pelea que mantuvo con Brezo, otro de los cachorros. Los expertos en felinos aseguran que las peleas entre hermanos suelen ser habituales, incluso cuando son pequeños.

Los padres de los cachorros son Garfio y Saliega, una hembra de 4 años que fue recogida en abril de 2002 en Sierra Morena (con aproximadamente 1 mes de edad) por equipos de la Junta de Andalucía. Saliega era el tercer cachorro de su camada y tenía, por tanto, muy escasas posibilidades de supervivencia en la naturaleza.

Trasladada de inmediato al zoo de Jerez, Saliega creció junto a Aura, otra hembra de la misma edad nacida en Doñana. Ambas fueron trasladadas luego al Centro de Cría de El Acebuche, en enero de 2003.