Dos personas tuvieron que ser rescatadas al quedarse aisladas en un islote formado por la crecida y posterior desbordamiento del río Pas entre las localidades de Puente Arce y Renedo de Piélagos, mientras que el Miera y varios ríos menores han provocado que numerosos vecinos de los pueblos que los bordean tuviran que abandonar sus viviendas al ser estas inundadas.

Más de 30 carreteras comarcales de Cantabria estaban al mediodía de hoy cortadas al tráfico, en tanto qe el acceso a la meseta por la carretera nacional 611 (Santader-Palencia) presentaba problemas en el tramo conocido como Las Hoces de Bárcena, en las próximidades de Reinosa.

Las localidades más afectadas por la borrasca fueron las costeras, con especial incidencia en Santander y Laredo, debido a que la lluvia coincidió con la pleamar. En tanto Laredo permanecía prácticamente incomunicada y sólo se podía acceder a ella por la zona alta de la localidad, la capital cántabra presentaba numerosos problema circulatorios.

Las riadas provocadas por las fuertes precipitaciones inundaron más de 20 viviendas en el populoso barrio de La Albericia, los sotanos de Ayuntamiento de Santander, los locales de Inserso y numerosos establecimientos comerciales del centro de la ciudad.

Fuentes de Protección Civil de del servicio de Bomberos han confirmado que la situación está controlada, sin que haya que temer por la seguridad de las personas. El centro meteorológico del Cantábrico ha indicado que la borrasca deaparecerá a últimas horas de la tarde.