DOS ETARRAS, REDUCIDOS A GOLPES POR LA POLICIA DURANTE UN JUICIO EN LA AUDIENCIA NACIONAL

- Uno de ellos se dirigió al tribunal para preguntarle cómo actuaría ahora, tras la tregua de ETA

MADRID
SERVIMEDIA

Los miembros de ETA Agustín Almaraz Larrañaga y Aitor Fresnedo Guerricabeitia fueron hoy reducidos a golpes por los servicios de seguridad de la Audiencia Nacional, tras negarse a acatar las instrucciones del tribunal que le estba juzgando.

El enfrentamiento se produjo en una sala ubicada en la segunda planta de la Audiencia Nacional, ya que las obras que se realizan en este organismo impidieron que se pueda disponer de la sala de juicios con cabina blindada, utilizada habitualmente en estos casos.

Los dos etarras entraron en la sala esposados a la espalda y acompañados, cada uno, por dos miembros de la Policía Nacional. Ambos se quejaron de esta situación y pidieron declarar sin esposas.

El presidente de la Sala, iro García, accedió a que se les esposara por delante del cuerpo, para que continuara el juicio, pero los etarras se negaron y, entre gritos, intentaron abandonar la sala por su propio pie.

Los policías les impidieron el paso en un primer momento, pero los dos terroristas se mostraron muy agresivos, tiraron el banco en el que se iban a sentar y comenzó un enfrentamiento.

En unos segundos se produjo un intercambio de puñetazos, patadas y empujones entre los dos miembros de ETA y los cuatro policía, que fueron inmediatamente apoyados por otros dos compañeros y alguno de los guardaespaldas que habitualmente están en la Audiencia Nacional.

Se necesitó la participación de 4 personas para reducir a cada uno de los etarras, a pesar de que estaban esposados, para ser posteriormente conducidos a los calabozos de la Audiencia, en la planta sótano.

Durante el forcejeo, Aitor Fresnedo, que se mostró más agresivo que su compañero, no dejó de gritar improperios y llamó "fascista" al tribunal en variasocasiones.

MANO IZQUIERDA

Una vez restablecido el orden, el fiscal solicitó que el juicio se aplazara, a la espera de poder contar con la sala blindada. Pero el presidente de la Sala, Siro García, pidió al defensor de los etarras que hablara con ellos y les tranquilizara, para así poder continuar el juicio.

El presidente del tribunal accedió a que les quitaran las esposas y el juicio pudo finalmente celebrarse con total normalidad, aunque finalmente fueron 10 los polícias que vigilaban dentro d la sala.

Durante la vista oral, los dos etarras se negaron a declarar y el fiscal mantuvo para cada uno de ellos una petición de 11 años de prisión por un delito continuado de terrorismo en relación con la colocación de una bomba, en mayo de 1994, en un edificio de la compañía Telefónica en Bilbao y también en una oficina del BBV.

Finalmente, durante el turno de última palabra, Aitor Fresnedo se dirigió al tribunal para preguntarle cuál sería la actuación de estos jueces ante la tregua de ETA. Lego, expresó su confianza en ser absuelto.

Los dos etarras juzgados hoy se han caracterizado en sus visitas a la Audiencia por su agresividad. En otra ocasión, en compañía de otro miembro de ETA, calificaron los juicios como "un teatro" e incluso amenazaron a jueces y fiscales diciéndoles: "Vais a caer unos detrás de otros".

(SERVIMEDIA)
30 Sep 1998
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