En concreto, el primer texto hace referencia al 11-M, pero sobre todo a los atentados fallidos del 1 y 2 de abril de 2004 contra la línea del AVE Madrid-Sevilla.

Unas autodenominadas Brigadas de la Muerte de Ansar-Al Qeda, explican que, "después del envío de soldados a Iraq y la persistente agresión contra los musulmanes (...) después de la decisión del Gobierno español de enviar los soldados de nuevo a Iraq (...) y después de comprobar nuestra capacidad para golpearos de nuevo y perjudicaros después de los golpes del 11 de marzo (...) nuestro objetivo era solamente avisar de nuestra capacidad para golpearos cuando quisiéramos".

Los siete suicidas de Leganés también tenían en su poder un segundo comunicado en el que las citadas "brigadas" comunican que "han decidido seguir en el bendito camino del yihad contra el criminal Bush y sus seguidores en Europa".

"La Brigada de Al-Andalus", prosigue el texto, "ha decidido permanecer en tierras de Al-Andalus hasta la retirada inmediata e incondicional de la España de las cruzadas de la tierra de los musulmanes".

Y si España no se retira de Iraq en el plazo del cinco días, se añade en ese texto hallado entre los escombros, "continuaremos nuestro yihad hasta que nos convirtamos en mártires de la tierra de Tareq Bin Ziad (el jefe militar musulmán que invadió España en el siglo VIII)".

"Habeis de saber que no conocereis la paz. ¿Cómo vais a estar en paz cuando nosotros la perdimos en nuestras tierras? Mas os mataremos en cualquier lugar y a cualquier hora sin distinguir entre militar o civil. Nuestros inocentes se mueren por miles en Iraq ¿Acaso vuestra sangre es más valiosa que la nuestra? Os golpearemos en vuestra propia casa. Trasladaremos la guerra a vuestras tierras y os quitaremos el sueño", señala el texto.