A su juicio, "no solamente en el ciclismo, sino en todos los deportes, habría ue realizar un seguimiento más exhaustivo del dopaje, porque queremos un deporte puro, de esfuerzo y de entrenamiento, no de química".

González dijo que el escándalo del Tour es un "duro golpe" para el ciclismo y recalcó que "el uso de todo tipo de sustancias que mejoren el rendimiento del deportista no está dentro del marco de la competición sana".

No obstante, señaló que "no es malo que haya pasado esto, en el sentido de que se pueden poner las medidas oportunas para que no siga sucediendo o novuelva a suceder". "Espero que sea un hecho aislado y que sirva para que, si hubiera algún interés por parte de alguien para que esto se extendiera, no se extienda, y se vuelva al trabajo del deportista".