El auto de la juez habilita a la empresa para que trabaje en una zona en la que estaba prohibido intervenir, pues se encuentra bajo una investigación jurídica que ayude a esclarecer el accidente y a dirimir responsabilidades.

Los trabajos previstos en la balsa de residuos consistirán, según la empresa, en estabilizar los canales de la erosión y el reforzamiento de los muros de contención mediante un contrafuerte de seguridad. Asimismo, se permeabilizará la balsa para evitar que pueda escapar cualquier tipo de residuo al río Agreo, que desemboca, a su vez, en el dañado río Guadiamar. Tras los trabajos la balsa de residuos quedará sellada y cerrada definitivamente.

La empresa pretende que en el plazo de dos meses esté terminado el trabajo de sellado de balsa, para que no le afecte el comienzo de la temporada de lluvias.

Para conseguir 20.000 toneladas de materiales destinados a sellar la balsa, la empresa procederá añana, a las 13 horas, a la voladura controlada de 4.000 kilos de explosivos de una mina de cinc en la conocida como "Mina de los Frailes", en las inmediaciones de la mina accidentada.