Según el alcalde, el socialista Juan Antonio Cabrera, no ha existido ningún problema para la cesión del suelo donde se ha comenzad a construir la planta de tratamiento. En su opinión, la gran mayoría de los vecinos no rechaza este proyecto.

El edil considera que la planta de reciclaje de basuras "será beneficiosa no sólo por los puestos de trabajo que generará, sino también porque desaparecerán muchos de los vertederos actuales", en referencia a los depósitos incontrolados u obsoletos que existen en la provincia.

En la construcción de la planta está previsto invertir unos 1.000 millones de pesetas y se crearán 32 puestos detrabajo directos. Entre otros pueblos que enviarán sus residuos a Villarrasa figuran Lepe y Gibraleón, donde los vecinos de opusieron a la construcción de plantas de reciclaje de residuos sólidos urbanos, en el primer caso, e industriales, en el segundo.

Según el alcalde de Villarrasa, mientras unos vecinos estiman que la instalación será beneficiosa porque permitirá erradicar algunos importantes problemas medioambientales, otros ven el proyecto con recelo.

Aunque las obras de la nueva planta comnzaron en los últimos días, aún se desconoce cuándo podrían concluir, por lo que no existe fecha para la apertura.