Los pacientes, que tienen el carácter de minusválidos, realizarán el trabajo a tiempo parcial, y durante un año con carácter prorrogable. El convenio firmado entre ambos organismos tiene como filosofía la prestación sanitaria y farmacéutica para la consecución de una completa adaptación social.

El Ayuntamiento de Málaga desembolsará una cantidad anual de 5.516.162 peseas, que estarán dedicadas a los salarios de los pacientes. Según un portavoz de la Diputación malagueña "el objetivo económico pretende que los pacientes puedan vivir en condiciones de una cierta dignidad".

El Servicio Provincial de Salud Mental de Málaga tiene como objetivo prioritario la integración social del grupo de minusválidos psíquicos, "mediante la realización de una actividad social que les conduzca a la percepción de sí mismos de forma más valorada".

Los pacientes serán entrevistados priódicamente por los responsables del Servicio de Rehabilitación, con lo que se pretende controlar el proceso de adaptación.