En la encuesta participaron en torno a 700 empresas, que en su mayoría tenían al menos al menos 25 personas con discapacidad en plantilla.

De ellas, un90% consideraba que estos trabajadores eran más leales a sus compañías, mientras que el 43% no creía que faltasen más a trabajar que el resto.

Un 86% de los encuestados opinaba que la mayoría de las empresas preferirían un candidato sin discapacidad frente a un candidato con discapacidad a la hora de cubrir un puesto de trabajo, y el 92% consideraba que seguía existiendo discriminación en los procesos de selección y en el entorno laboral.

Un 80% de los responsables de estas empresas afirmó tener un buen conocimiento sobre la Ley contra la Discriminación de las Personas con Discapacidad (DDA, según sus siglas en inglés).

A pesar de ello, existían lagunas sobre las dolencias que quedaban cubiertas por la DDA, y también sobre el programa para el fomento del empleo de las personas con discapacidad "Acces to work" (Acceso al empleo), que un 25% consideraba difícil de utilizar.

Un 75% de las empresas que participaron en la encuesta habían realizado las adaptaciones del entorno laboral necesarias para acomodar a sus trabajadores con discapacidad.

Algunos de ellos habían realizado importantes esfuerzos en este sentido, como incorporar intérpretes de la lengua de signos, ofrecer ayudas para la adquisición de audífonos y sillas de ruedas, o utilizar colores en vez de números para facilitar la identificación de los productos a trabajadores con discapacidad visual.

Otros introdujeron avisos luminosos y sonoros para trabajadores sordos y ciegos, distinguían con colores vivos los accesos y permitían la entrada de perros guía para garantizar la accesibiliad de los trabajadores con discapacidad visual, ofrecían plazas de aparcamiento gratuitas, o permitían a los empleados disléxicos grabar sus informes en formato audio en lugar de escribirlos.

Los autores del documento concluyen que la sensibilización empresarial sobre las dificultades a las que se enfrentan los trabajadores con discapacidad es elevada en el Reino Unido, pero en su opinión aún queda mucho por hacer para superar la discriminación que continúa dificultando el progreso de estos empleados en el entorno laboral.