Según explicó hoy a Servimedia el presidente de la Asociación Nacional de Empresarios por la Calidad del Ocio (ECO), Dionisio Lara, podrán encontrarse entradas desde 17 euros hasta cerca de 150 euros, en función del tipo de fiesta y de lo que incluya el pase.

En concreto, las fiestas universitarias oscilarán entre los 17 euros (entrada con una copa) y los 45 euros (barra libre); las discotecas se moverán entre los 30 euros y los 50 euros; y algunas salas de fiesta dispondrán de "zonas vip", para "dar exclusividad al públicos de más alto poder adquisitivo", con precios que pueden llegar hasta los 150 euros.

Otra estrategia de la que se servirán los locales será la venta anticipada de entradas, en la que se podrán encontrar descuentos de cerca del 30% de la entrada.

Por otro lado, la afluencia de público aumentará esta Nochevieja entre un 15% y un 20%, es decir, en cerca de un millón de personas, debido a que mucha gente se quedará en casa durante las fiestas, en lugar de hacer viajes.

Muchas personas que otros años "se iban a Londres o a París a pasar la Nochevieja, este año se quedarán en casa", apuntó Lara.

LA MITAD DE GASTO

De hecho, según esta organización, el gasto medio de los españoles en Nochevieja caerá cerca de un 50% con respecto a años anteriores.

"Sin embargo, esa disminución beneficia al sector del ocio nocturno, porque ese dinero, aunque sea menos, se quedará todo aquí", dijo Lara.

De esta forma, el sector augura una "buena Nochevieja" que, sin embargo, no compensará las pérdidas acumuladas en el resto del año y la "escasa afluencia" que esperan para el periodo navideño en general, que será "flojo", más allá del pico que supone la noche de fin de año.

En este sentido, el sector augura que cerrará el año con pérdidas, que serán muy diferentes en función de la ciudad de la que se trate.

Focos turísticos y de ocio, como Madrid, Barcelona o Valencia, facturarán aproximadamente un 0,5% menos que en 2007. Sin embargo, en el resto de ciudades la caída puede ser cercana al 10%, porque "la gente sale menos" e, incluso la que sale de noche, lo hace "con menos alegría".

Estos datos son menos graves que los de otros sectores económicos, debido a que "los ciclos de la crisis no coinciden con los de la actividad del ocio. La gente no cambia de coche, pero sale a tomar una copa". Eso sí, "cuando se supere la crisis, al sector del ocio le costará más recuperarse, porque la gente se habrá acostumbrado a ahorrar y salir menos".