Recientemente, la directora de Aesleme, Mar Cogollos, se dirigió al director general de Tráfico para exponerle numerosas quejas que hacían los discapacitados conductores referentes a los límites de velocidad y sobre los requisitos a seguir para poder anularlos.

Según la Dirección General de Tráfico, no existe ninguna reglamentación que exija esos límites, sino que era el examinador el que podría ponerlos en función de la destreza del discapacitado en el manejo de los mandos delvehículo.

Para suprimir la limitación de velocidad del conductor discapacitado, éste debe someterse a una prueba práctica a fin de que un funcionario examinador y un facultativo evalúen su capacidad para conducir sin limitaciones de velocidad por razón de sus deficiencias.