Olivares se ha casado con su novia "de toda la vida" y declaró a la entrada de los juzgados que no disfrutará de luna de miel, "a no ser que se entienda como una luna de miel estar al pie del cañón imerso en el trabajo habitual de mi departamento".

El director general de la Policía eligió la capital burgalesa para celebrar su boda, ya que aún está muy ligado a esta ciudad, en la que inició su carrera política como concejal del PSOE cuando era alcalde José María Peña.

Olivares fue también delegado del Gobierno en Castilla y León, antes de ocupar la Dirección General de la Policía.

Antes de firmar el acta de matrimonio, no pudo evitar las preguntas de los periodistas y volvió a justificarsu negativa a facilitar información a Garzón sobre los 'papeles de Laos' acogiéndose al secreto profesional.

Olivares mostró su extrañeza por las críticas suscitadas tras su negativa ante Garzón y dijo que "me extraña que cause sorpresa el acogimiento al secreto cuando está, además, amparado en un informe muy serio y riguroso de los servicios jurídicos del Estado".

"Espero que la discusión se produzca en términos doctrinales y no en otros términos, como se ha producido a mi parecer, desde la ignoancia en algunos casos o del intento de sacar un partido político que no tiene".