El director general de Fiat critica el mercado laboral español --------------------------------------------------------------
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El presidente de Banesto, Mario Conde, afirmó hoy que el Estado debería tener "menos peso en la banca y en la industria", mientras que el director general de Fiat, Giorgio Garuzzo, censuró la "extrema rigidez" de que, a su juicio, adolece el mercado laboral spañol.
Ambos formularon estas críticas en el curso de un debate organizado hoy en Madrid por la Embajada de Italia bajo el título "España e Italia frente al desafío del mercado único", en el que también participaron los ministros de Industria de los dos países, Claudio Aranzadi y Guido Bodrato, respectivamente.
Conde abogó por una política industrial "al servicio de los intereses globales de la economía" mediante la aplicación de medidas que permitan a las empresas "desarrollarse por sí solas". En su opinión, el Estado no debe meterse a gestionar empresas y sería aconsejable que se limitase cada vez más a crear las condiciones para que la iniciativa privada pueda salir adelante.
Por su parte, el director general de la Fiat, dueña de la empresa Pegaso, que compró al INI, advirtió que la "extremada rigidez" del mercado laboral español puede convertirse en "un importante obstáculo para hacer frente a la competencia europea y mundial".
Para Garuzzo, la flexibilidad laboral se ha vuelto mprescindible porque las reestructuraciones han dejado de ser fenómenos episódicos para convertirse en "una dimensión permanente de las empresas". Añadió que las inversiones extranjeras deberían encontrar un ambiente más favorable "en el ámbito político y sindical".
LA INVERSION EXTRANJERA Y EL EMPLEO
En las jornadas intervino también el presidente del Consejo Superior de Cámaras de Comercio e Industria, Guillermo de la Dehesa, quien reveló que la inversión extranjera creó el 35 por ciento de los pustos de trabajo generados en el sector industrial español entre 1986 y 1990.
De la Dehesa opinó que, en los próximos años, España debería optar por un modelo de desarrollo "a la italiana", no tan basado en costes salariales bajos sino en una mayor cualificación de los trabajadores y en una calidad superior de los productos.
A su juicio, España seguirá atrayendo a la inversión foránea, además de por contar con mano de obra barata, por el atractivo que supone su estabilidad política y su ritmo de cecimiento superior a la media de la CE.
Por su parte, el ex presidente del Gobierno y actual consejero del Banco Hispano Americano, Leopoldo Calvo Sotelo, insistió en la necesidad de moderar los costes salariales, al señalar que la producción del trabajador español es actualmente el 85 por ciento de la media comunitaria.
Sin embargo, criticó también a los empresarios que "por la mañana piden un menor gasto en los Presupuestos del Estado y por la tarde reclaman la aplicación de medidas concretas qe suponen un incremento de dicho gasto".
Finalmente, enumeró algunas de las medidas que, en su opinión, deben tomarse para mejorar la competitividad, entre ellas la reducción de las cuotas empresariales a la Seguridad Social, una reforma fiscal que favorezca el empleo y la inversión y un mayor gasto en infraestructuras.
(SERVIMEDIA)
09 Oct 1991
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