En una entrevista concedida a Srvimedia, el primer ejecutivo de la firma en España indicó que el comprador de coches español "es muy listo, pide calidad y prestaciones", pero "tiene un defecto, pensar que se puede seguir por el camino de los descuentos" de forma indefinida.

A juicio del responsable de Citroën Hispania, "los fabricantes han hecho mucho en materia de descuentos y hay un límite". De David-Beauregard se mostró preocupado por el nivel alcanzado por los descuentos y aseguró que ello está afectando a la rentabilidad de la empresas del sector.

"Hay que vigilar el tema de la rentabilidad de la empresa. Estamos alcanzando un nivel preocupante, se llamen descuentos o regalos de equipamiento, para mi es igual", señaló, al tiempo que indicó que es muy difícil cuantificar la pérdida de rentabilidad de las empresas por este motivo.

De David-Beauregard explicó que estos descuentos y regalos no se pueden mantener durante mucho tiempo, sobre todo si el mercado no es muy boyante. En su opinión, esta "guerra" de precios "no e sana". Señaló que es consecuencia de la presión de la competencia y de una evolución del mercado "poco brillante".

El responsable de Citroën Hispania explicó que el aumento de las ventas de coches registrado en España en lo que va de año (del 21 por ciento) puede dar lugar a pensar que "vamos muy bien", pero, a su juicio, hay que tener en cuenta que la comparación se hace con 1993, un año "desastroso" para el sector.

Además, según De David-Beauregard, en este aumento han influido de manera deterinante las ventas de coches a las empresas de "rent a car", que han aumentado en lo que va de año un 87 por ciento, y que en su mayoría se destinan a la exportación y no a coches para alquilar en nuestro país.

A su juicio, esto da una idea equivocada del comportamiento real del mercado español, que "es mi preocupación". De David-Beauregard estima que, si no se tienen en cuenta las ventas a las empresas de alquiler de coches, el crecimiento del mercado interior en lo que va de año es del 14 por ciento. A este aumento de las ventas también han contribuido los planes Renove puestos en marcha por el Gobierno. El director general de Citroën Hispania indicó que estos planes están funcionando "muy bien" y están teniendo un impacto "importante" en las ventas, pero insistió en la necesidad de eliminar el impuesto de matriculación.

PREVISIONES PARA 1995

Por lo que se refiere a las previsiones para 1995, De David-Beauregard es moderadamente optimista y cree que no será un año "excepcional" para el mercdo del automóvil. A su juicio, las ventas de coches aumentarán en 1995 un 4-5 por ciento, situándose todavía a gran distancia de las registradas en 1992 (979.409 coches), que no fue un año "récord".

Según De David-Beauregard, 1994 se cerrará con unas ventas que rondarán los 850.000 coches, frente a los 743.000 turismos de 1993. A su juicio, para alcanzar unos niveles de ventas similares a las de un año "normal" como fue 1992, "hay que seguir con algo de ayuda". En este sentido, aseguró que la desapariión del impuesto de matriculación "supondría un empujón muy fuerte".

De David-Beauregard habló también al futuro del sector en España y en Europa. En su opinión, "todas las marcas que hay instaladas en España se pueden mantener". No obstante, advirtió que "si se introduce alguien más, lo pagará otra marca". Añadió que en este momento la competitividad de las empresas españolas es "razonable".

El responsable de Citroën Hispania indicó que no comparte las ideas de Ignacio López de Arriortúa de que n el futuro se reducirán las marcas de coches y habrá una concentración de marcas en Europa. Sí cree, sin embargo, que la industria del automóvil camina hacia la especialización.

Según el director general de Citroën Hispania, puede haber alianzas entre las marcas para fabricar productos concretos, como motores, cajas de cambios o un modelo con un pequeño mercado, pero no desaparecerán marcas. De David-Beauregard indicó que en estos momentos "nosotros compramos fuera de la empresa el 60 por ciento del oche" y que eso se puede generalizar al resto de marcas.

El responsable de Citroën avaló su idea de que no desaparecerán marcas de coches diciendo que en Europa hay un mercado de coches más importante que en Japón, mientras que ese país existen más marcas que en Europa.