El director de la prisión, Santiago Martínez Cadarso, afirmó que los presos que ocupan este edificio, que no tienen permisos y que están separados de los internos que sí pueden salir a la calle, utilizan las visitas de sus familiares para conseguir la droga.

La medida adoptada por la dirección de la cárcel de separar a unosinternos de otros no ha conseguido apenas reducir la entrada de estupefacientes.

Según Martínez Catarso, "en relación a cuando estaban mezclados los presos, hay más control, entra menos cantidad de droga, pero hay un aumento relativo en el bis a bis".

La dirección ha optado por efectuar análisis a la mayoría de reclusos que tuvieron permiso de salida a finales del pasado mes, con la intención de comprobar si habían consumido drogas.

Asimismo, el aumento de las medidas de control ha dado comoresultado la intervención de estupefaciente a internos que pretendían introducirlo en el centro penitenciario.