Según fuentes socialistas, este congreso se celebrará, previsiblemente, antes del verano, con unos meses de adelanto sobre lo inicialmente previsto.

El PSOE, que celebra sus congresos ordinarios cada tres añs, realizó el último en junio de 1997, por lo que, en cualquier caso, iba a celebrar un congreso este año, y se pensaba convocarlo para otoño.

Sin embargo, la dimisión del secretario general, que conlleva la de toda la Ejecutiva, acelerará estos plazos. Este punto será estudiado mañana por la Comisión Ejecutiva, que a su vez convocará al Comité Federal para que tome una decisión sobre plazos, fechas y carácter del congreso, ordinario o extraordinario.