IU califica de "intransigente" la actitud de la empresa, por impedir la visita que tenían previsto ealizar Angel Pérez, Julio Misiego y Fernando Marín, diputados regionales los tres y el primero de ellos, coordinador regional de la coalición.

En la factoría de Madrid de Piaggio trabajan unos 350 empleados, amenazados por un posible cierre y venta de los terrenos donde está ubicada la sede. Ante esta situación, CCOO explica en una carta dirigida a IU, y a la que tuvo acceso Servimedia, que se han dirigido a la dirección de la empresa para que les despejen estas incertidumbres.

En la misiva, el itado sindicato solicita a la coalición que "realicen las gestiones oportunas para que la dirección despeje el futuro industrial, nos diga la viabilidad de la empresa, rentabilidad de los productos que fabricamos, posible ubicación futura de la factoría, previsiones de empleo (en 1987 la plantilla fija era superior a 650 trabajadores) y nuevos modelos a fabricar".