Según el subdirector de Doñana, Alberto Lrramendi, la caída de un 50 por ciento menos de agua en forma de lluvia, que en una época normal es de 550 a 570 milímetros por metro cuadrado, ha provocado que el Instituto para la Conservación de la Naturaleza (Icona) activase el dispositivo contra incendios antes de la fecha prevista, dado que se puso en marcha en la segunda quincena del mes de mayo.

Este adelanto fue motivado, en parte, por la coincidencia de la sequía y la llegada de miles de romeros, muchos de los cuales atravesaron Doñana en superegrinar hasta El Rocío, aldea situada en el entorno del parque nacional.

El dispositivo puesto en marcha para prevenir los incendios está integrado por 4 torres contraincendios y una central de comunicaciones, así como por 8 retenes dotados cada uno de un camión con material de extinción.

El pasado día 14, una hora antes de la llegada del Papa a la aldea de El Rocío, se produjeron en las proximidades de Doñana, en los términos onubenses de Almonte e Hinojos, cuatro incendios forestales presuntmente intencionados.