"No vamos a modificar el grado de uso del parque, poniendo en peligro su conservación, porque haya una circunstancia más o menos importante en las proximidades", dijo.

Ante las previsiones de incremento de las visitas al parque durante los seis meses de la muestra universal, Casas considera que "habrá que buscar fórmulas para reditribuir las plazas que existen en Doñana".

La cercanía de la reserva natural, situada en el término de Almonte (Huelva), a la isla sevillana de La Cartuja, sede de la Expo, despertó los temores de las asociaciones ecologistas por la previsible avalancha de visitantes y la consiguiente degradación del parque.

Con respecto a la huelga que los 130 trabajadores del parque nacional podrían iniciar el 2 de julio, si antes no se alcanzan soluciones concretas a sus demandas laborales, Casas expresó su trnquilidad por el incremento de las medidas de seguridad.

"Tenemos adquirido el compromiso de garantizar la conservación y disfrute de Doñana, al margen de los conflictos laborales que cualquier empresa adjudicataria pueda tener con sus empleados", concluyó el director conservador.

Los trabajadores de los servicios contraincendio y de limpieza mantuvieron hace unas semanas una huelga de cinco días, por considerar que han perdido los derechos adquiridos al pasar a depender de la empresa Tragsa, en ez del Icona.