Esa reunión, auspiciada por la presidenta del Congreso, Luisa Fernanda Rudí, quería concitar el acuerdo de los grupos sobre la necesidad de sacar adelante el nuevo Reglamento de la Cámara por consenso.

En ella, se comenzó analizando los trabajos realizados durante la pasada legislaturapara la reforma del Reglamento y se ha podido constatar la "firme voluntad" de todos los asistentes de lograr un acuerdo definitivo "en el plazo más breve posible".

Según ha trascendido hoy, ls Grupos han podido llegar a un acuerdo básico sobre la composición de los órganos de gobierno de la Cámara y el funcionamiento de los plenos, las comisiones y la Diputación Permanente.

Igualmente, parece cercano el acuerdo sobre la creación y métodos de trabajo de las comisiones de investigación y de su no intromisión en las investigaciones judiciales.

En la reunión de Ordesa se ha acordado dar un decidido impulso a la introducción de nuevas tecnologías en el funcionamiento de la Cámara que ermita, por ejemplo, el envío y presentación de documentos por medios telemáticos.

En el nuevo Reglamento se introducirá por primera vez el reconocimiento de los derechos derivados de la paternidad y maternidad de los diputados y diputadas, así como la necesidad de dotar de más medios materiales a los electos para el desempeño de sus tareas.

Finalmente, se debatió sobre la futura regulación de los grupos parlamentarios y en particular sobre los criterios para su formación y para evitar el trasfuguismo mediante la figura del diputado no inscrito.

Los portavoces parlamentarios volverán a reunirse a principios del mes de septiembre, coincidiendo con el inicio del período de sesiones para tratar de llegar a un acuerdo que permita la convocatoria de la ponencia encargada de redactar el borrador de Reglamento.