Al formular una pregunta en la sesión de control al Gobierno, Zaplana pidió a la vicepresidenta, "tan aficionada a disfrazarse", que algún día se disfrace de lo que exige su cargo.

Zaplana se refería a las imágenes que mostraban a la vicepresidenta vestida con indumentaria tradicional africana durante su reciente visita a Kenia y Mozambique para celebrar con las mujeres de estos países el Día Internacional de la Mujer.

"Cuánto ganaría la Cámara si usted, que es tan aficionada a disfrazarse, de vez en cuando, un día, aunque sólo fuera un día, se vistiera de vicepresidenta del Gobierno y cumpliera con la obligación...", dijo Zaplana, que no pudo continuar sus palabras por el bullicio levantado en los bancos del PSOE.

El presidente del Congreso, Manuel Marín, intervino con celeridad para pedir a los diputados que "ajusten su propio comportamiento a la necesidad de un debate político de envergadura". "Estoy hasta el gorro de repetirlo", llegó a decir Marín, visiblemente enfadado.

Zaplana tomó la palabra de nuevo para asegurar que no creía haber cometido ningún "exceso". "No le he dicho que le falten escrúpulos, sólo que la hemos visto disfrazarse y que, por favor, que un día se vista de vicepresidenta del Gobierno y conteste a lo que le preguntamos en la sesión de control".

La insistencia de Zaplana suscitó protestas aún más airadas de los diputados del PSOE y todas las mujeres del grupo comenzaron al unísono a abandonar sus escaños, seguidas de las parlamentarias de Izquierda Unida y ante la expectación del resto del hemiciclo.

Zaplana aseguró que el PP seguirá ejerciendo su labor de oposición y de control al Gobierno a pesar "de la presión", y prosiguió con su pregunta sobre el Estatuto de Cataluña.

La vicepresidenta aseguró que la realidad "es la que es" y que el Estatuto acordado para Cataluña será bueno para el conjunto de España.

Al responder, la vicepresidenta aseguró que se sintió "absolutamente honrada" dehaber representado a España, a sus ciudadanos y, sobre todo, a sus mujeres, en una cita para compartir con las mujeres africanas "un futuro de esperanza".

"Prefiero esa imagen que la imagen de las Azores", dijo la vicepresidenta, en referencia a la cita en la que se declaró la que se declaró la guerra contra Iraq y en la que estaba el presidente español, José María Aznar. "Creo que la mayoría de los ciudadanos están conmigo", añadió.

En su caso, dijo la vicepresidenta a Zaplana, "no sé si es un problema de ignorancia, que sería inexcusable, de maledicencia, que sería intolerable, o de machismo detestable. Creo que son las tres cosas", sentenció.

Las diputadas socialistas comentaban en los pasillos lo que consideran "ignorancia" del portavoz popular sobre el motivo y el contenido real del viaje de la vicepresidenta a Africa. Incluso se escuchó a una de ellas invitando a Zaplana "a disfrazarse alguna vez de corrupto".

Las diputadas Virtudes Moteserín (PSOE) y Carme García (IU-ICV) explicaron después el motivo de esa respuesta contundente de las mujeres de la bancada izquierda del hemiciclo a las palabras de Zaplana.

Ambas denunciaron que "llueve sobre mojado" porque Zaplana ha pronunciado en ocasiones anteriores reflexiones ofensivas sobre las mujeres y, en concreto, contra la vicepresidenta.

Carme García juzgó "misógina" la actitud de Zaplana y Monteserín se mostró convencida de que el portavoz popular "no quiere entender que la situación ha cambiado y que tiene que compartir la Cámara con las mujeres".

La polémica tuvo continuidad en la sesión de control porque el portavoz económico del PP, Vicente Martínez-Pujalte, inició su pregunta con sorna sobre el efecto que pudo tener en la economía española el reportaje publicado por la revista "Vogue" sobre las mujeres del Gobierno.

El enfado de Marín fue considerable al preguntar a Martínez-Pujalte si había entendido "algo" de lo que había pedido al comienzo de la trifulca.