La Diutación guipuzcoana mostró su solidaridad con la familia manifestando que "no están solos, todos somos familia de Julio Iglesias Zamora en este momento; de la misma manera que mientras Julio no esté en libertad, todos permanecemos secuestrados".

Esta muestra de solidaridad, la Institución foral la hizo extensible a los trabajadores de los que elogió su postura de "seguir trabajando con normalidad dentro de su compromiso con la sociedad".

El Consejo de Diputados exigió, asimismo, el cese inmediatode "tan aberrante pisoteo de los derechos humanos" y que "se ponga fin a una forma tan cruel y despiadada de tortura. No es sólo la libertad del señor Iglesias la que está amenazada, es la libertad de todos lo que se encuentra en manos de un grupo de locos que quiere imponer sus vías por encima de la voluntad mayoritaria de los vascos y cerrar el paso a todo tipo de futuro en paz y progreso".

Desde el máximo organo de Gobierno en Guipúzcoa se denunció "todo tipo de actitudes cómplices o simplemente paivas como las que se dan en el caso de HB y LAB" y puntualizaron que "no hay que tener miedo ni ante ETA ni ante KAS", sino que hay que hacer frente "a la extorsión, la imposición de ideas y a los métodos violentos mediante un compromiso personal y colectivo".

FinalmeNte, hacen un llamamiento a las organizaciones empresariales, sindicatos, partidos políticos y el conjunto de las fueerzas sociales y ciudadanía guipuzcoana para que hagan frente al chantaje y al silencio que pretenden imponer los terroritas y aquellos que les apoyan o toleran".