Bélgica enviará una delegación a varios países europeos para "lavar" su mala reputación a causa del escándalo de las dixinas. Estas buenas intenciones coinciden con el visto bueno que los veterinarios comunitarios han dado finalmente al método de análisis presentado por las autoridades belgas, como les pidió la UE.

De cualquier forma, para conocer el desenlace de toda esta crisis habrá que esperar a la reunión que el Comité Veterinario de la UE celebrará el próximo día 21 de septiembre.

Mientras tanto, distintas delegaciones enviadas desde Bélgica visitarán nuestro país, así como Italia, Reino Unido y Grecia, par intentar convencer a estos cuatro grandes "reticentes" de que hay garantías para volver a permitir las exportaciones belgas.

"Hay que pasar a la ofensiva y mostrar a todos estos países que hemos llevado a cabo grandes esfuerzos para sanear la situación", manifestó Freddy Willockx, el comisario del Gobierno belga encargado de la crisis de la dioxina.