El Gobierno belga ya había denunciado el pasado mes ante el Comité Veterinario Permanente la existencia de estos niveles excesivos del precursor de la dioxina en la carne de Holanda y Dinamarca. Por esta razón, la Comisión Europea solicitó a Bélgica información sobre las pruebas efectuadas a las importaciones de carne de otros países comunitario.

En esa ocasión, los ministros belgas de Agricultura y Sanidad, Jaak Gabriels y Magda Aelvoet, adelantaron que dos de los análisis efectuados a las exportaciones de otros Estados miembros revelaban la presencia de 241 y 247 nanogramos de PCB por gramo de masa, respectivamente, mientras que la legislación comunitaria, a raíz de la crisis de la dioxina en Bélgica, establece un límite máximo de 200 nanogramos de PCB por gramo de masa.