Los dimisionarios, entre los que se encuentran el máximo responsable de IU en la comunidad autónoa, Juan José González, y los coordinadores provincial de la coalición en Toledo, Ciudad Real y Albacete, argumentan que dicho proyecto no tiene respaldo en la sociedad española.

Según el hasta ahora secretario del PCE en Castilla-La Mancha, Pedro Pablo Novillo, que compareció en Toledo en rueda de prensa junto al resto de dimisionarios, "no compartimos la práctica de los hechos que han convertido al PCE en un instrumento de control y tutela de proyectos".

Novillo, que se mostró partidario de ensachar la base social y electoral de IU, precisó que el PCE "no es un partido plural y colectivo y por ello queremos que desaparezca sin renunciar a la historia y al protagonismo que ha tenido en nuestro país".

Por el momento, los 15 dirigentes de IU no van a renunciar a su militancia en el PCE, a la espera de lo que ocurra en el congreso federal de los comunistas que se celebrará el próximo mes de diciembre. Sin embargo, sí han renunciado a los tres representantes que el PCE de Castilla-La Mancha teníaen el comité federal de este partido.