Los dos políticos declararon que siguen pensando que el centro es un buen proecto, pero que resulta muy duro trabajar por una idea política cuando su aceptación social está bajo mínimos, como han puesto de manifiesto los repetidos fracasos electorales.

Fernández Ilarraza y Ortiz de Urbina consideraron que no es conveniente tapar el paso, con su presencia desmotivada en los cargos, de aquellas personas que todavía tienen ilusión por la continuidad del CDS en La Rioja.

Su salida de la dirección centrista exigirá la convocatoria urgente de un congreso extraordinario o la contitución de una gestora.

El CDS cuenta en La Rioja con algunos alcaldes y concejales, como la primera teniente de alcalde del Ayuntamiento de Logroño, Pilar Salarrullana, muy conocida por su actividad parlamentaria en la lucha contra las sectas.

Salarrullana manifestó que su aspiración actual no va más allá de cumplir con dignidad hasta el final del mandato municipal, previsto para el próximo mes de mayo. Reconoció que lo que le pide el cuerpo es abandonar la política y marcharse a casa, como suscompañeros de partido.