La OMS y sus socios, respondiendo al llamamiento mundial para la acción, han organizado esta campaña para limpiar el deporte de too lo que se refiere al tabaco: consumo de tabaco y exposición pasiva al humo ambiental del tabaco, publicidad, promoción y comercialización del mismo.

Según la OMS, los productos del tabaco no exaltan la vida: causan enfermedad y muerte. El tabaco mata más de 4 millones de personas cada año, y se estima que matará a 8,4 millones de personas al año en 2020.

En el deportista profesional, el consumo de tabaco disminuye su nivel de rendimiento y puede poner fin a su carrera. En el deportista ocasiona o en el que practica un deporte como forma de ocio, el consumo de tabaco reduce su capacidad deportiva.

Además, en el espectador de acontecimientos deportivos, el consumo y la exposición pasiva al humo del tabaco contribuyen a la aparición de enfermedades y reduce su disfrute del juego.

Para los equipos e instalaciones deportivas, la publicidad y el patrocinio del tabaco están en contradicción con los ideales de salud y juego limpio asociados al deporte. En resumen, tabaco y deporte son incompatbles, subraya la OMS.

JOVENES ADICTOS

Muchos deportistas, aficionados al deporte y espectadores, son jóvenes. Datos recientes indican que uno de cada tres jóvenes empieza a fumar antes de los diez años. El tabaquismo entre los jóvenes está creciendo en muchas partes del mundo. La mayoría de los que empiezan a fumar tan jóvenes se convierten rápidamente en adictos a la nicotina. Incapaces de dejarlo, se convierten en grandes fumadores y siguen fumando a lo largo de toda su vida. Millones de esos jóvees terminarán muriendo por causas relacionadas con el tabaco.

La OMS insta a todo el mundo a recuperar su derecho a la salud y a una vida saludable y a proteger a las futuras generaciones de las muertes y enfermedades prevenibles causadas por el tabaco.

En España, un 34,3% de la población mayor de 16 años es fumadora y la mortalidad atribuible al tabaco (como factor determinante aunque no único) se ha estimado en torno a las 55.613 muertes, que representan el 16% de todos los fallecimientos ocurrdos en la población de 35 años o más.