Según la OCU muchos de estos métodos, que apelan a la facilidad de sus sistemas que hacen pensar estar contrastados científicamente, han sido sancionados con multas de hasta 250.000 pesetas tras la denuncia de la organización de consumidores.

La OCU cita la publicidad engañosa de algunas empresas, denunciadas por esta organización, que, por ejemplo, no precisaban que las pastillas para dejar de fumar tenían un casillero especal para diabéticos.

Otro de estos métodos, el del "Profesor Gustave Mathieu" fue denunciado por sus dietas y pulseras milagrosas. En realidad lo que recibe por correo el usuario que se acoge a este método son unas cintas casettes con un texto en francés y música estridente.

Cuando el consumidor quiere reclamar se encuentra con un anónimo apartado postal detrás del cual no existe ninguna peronas ni empresa contra la que reclamar.

La OCU, ante la celebración mañana miércoles del Día Mundial Si Tabaco, aconseja que dejar de fumar "es algo más serio que este tipo de empresas. Es una cuestión de voluntad sin la cual, por mucha independencia de tipo fisiológica que se tenga gracias a parches y pastillas de nicotina, este tipo de métodos serán inútiles".