El número de suspensiones de pago, no obstante, se redujo un 35% y fue de 26. Las empresas que se declararon en esta situación, si embargo, presentaban un activo para afrontar sus deudas de 47.527 millones de pesetas, con un incremento del 187%.

En cuanto a las quiebras, su pasivo era de 5.208 millones de pesetas, un 6% menos que en septiembre. El activo era de 4.065 millones de pesetas (un 25% de aumento), mientras que el número de compañías ascendía a 44, con un aumento del 7%.