El organismo liderado por Pablo Hernández de Cos estimó en agosto que la deuda pública había bajado hasta el 113,1% del PIB en la primera parte del año. Sin embargo, esta proyección se ha visto trastocada por la última revisión de la Contabilidad Nacional realizada por el INE.

Hace dos semanas, Estadística corrigió al alza el crecimiento económico de 2021 –desde el 5,5% al 6,4%– y 2022 –del 5,5% al 5,8%–. Estos retoques han modificado todas las proyecciones macroeconómicas y han obligado también a revisar las estadísticas, entre ellas, la de la deuda pública, que se reduce ahora en 1,9 puntos del PIB con respecto a la estimación inicial.

Así las cosas, el Banco de España estima ahora que la deuda pública se situó en el 111,6% del PIB al término de 2022, frente al 113,2% proyectado inicialmente, unas cifras que se asemejan a las que compartió ayer la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef). No obstante, en términos de volumen, sigue incrementándose por lo que la reducción de la ratio deuda/PIB lograda en la primera parte del año equivale solo a 0,4 puntos del producto interior bruto.

De hecho, la deuda volvió a alcanzar a finales de junio un máximo histórico, alcanzado los 1,568 billones de euros. Esta cifra supone un incremento del 6,3% con respecto al mismo periodo del año anterior, y del 2,2% en comparación con el primer trimestre. Así las cosas, la deuda pública se ha engrosado en 92.551 millones en apenas un año y en 33.358 millones solo en el segundo trimestre.

POR DEBAJO DEL 110% DEL PIB

Tras conocer los datos, el Gobierno celebró las nuevas estimaciones del Banco de España, y aseguró que "la buena gestión fiscal y la fuerte recuperación de la economía española que se mantiene en 2023" permitirán "una fuerte reducción de la ratio deuda/PIB este año, mayor de la prevista".

Así, fuentes del Ministerio de Asuntos Económicos dan ahora por hecho que cerrará por debajo del 110% del PIB este mismo año, un objetivo que se había marcado inicialmente para 2024. La Airef coincide en este augurio y sostiene que la deuda se situará entre el 108% y el 109% del PIB a finales de este ejercicio.

"De esta forma, se adelantan los objetivos fiscales fijados en el Programa de Estabilidad, avalados por la Comisión Europea. En 2022 ya se logró una reducción récord de la ratio de deuda pública de 5 puntos porcentuales en un año. En un contexto internacional de incertidumbre, España mantiene la confianza de los inversores, con una demanda sólida y diversificada", añadieron desde la cartera dirigida por Nadia Calviño.

POR ADMINISTRACIONES

En cuanto a la evolución de la deuda de los distintos subsectores de las administraciones públicas, el saldo de la deuda del conjunto de la Administración Central se elevó hasta superar los 1,42 billones, lo que representa el 100,7% del PIB, un 7,1% más que hace un año.

Por su parte, el saldo de deuda de las Administraciones de Seguridad Social se situó en 106.000 millones, el 7,5% del PIB, con un crecimiento interanual del 7%.

Respecto a las administraciones territoriales, la deuda de las comunidades creció hasta los 327.000 millones de euros en junio, con una variación interanual del 3,3%; mientras que la deuda de las corporaciones locales se situó en 24.000 millones de euros, un 4,3% más que el saldo registrado en junio del año pasado.

En cuanto a la evolución de la deuda por instrumentos y plazos, la deuda materializada en valores a largo plazo experimentó un crecimiento interanual del 7,8%, mientras que los préstamos a más de un año se redujeron en un 5,7% con respecto al segundo trimestre de 2022. Por su parte, el incremento interanual de los instrumentos a corto plazo fue del 11,1% en el segundo trimestre de este año.